¿Podrías presentarte por favor?
Soy una fisioterapeuta jubilada del Reino Unido. Estaba interesada en el suelo pélvico cuando volví a trabajar cuando mis hijos empezaron a ir al colegio. Cuando regresé, el puesto vacante estaba en obstetricia y ginecología, y empecé allí ya que tenía experiencia previa. Nunca esperé verme en estas grandes conferencias y en esta situación. Estoy feliz de estar aquí.
¿Cómo te metiste en la investigación?
Bueno, siempre tuve una mente inquisitiva y fui a una reunión con urólogos y ginecólogos. Me preguntaron que qué hacía, así que les dije, soy fisioterapeuta. Hubo algunas sorpresas, esto fue en 1984. Luego preguntaron, ¿qué haces para la incontinencia? Le expliqué que algunas formas de incontinencia se deben a la debilidad de los músculos del suelo pélvico que se estira durante el parto y que esto puede desgarrarlos y debilitarlos. Como fisioterapeuta, entrenamos para evaluar los músculos para ver si están trabajando, su fuerza y cuánto tiempo pueden contraerse. Luego los reeducamos. Estos doctores me dijeron. Bueno, no hay evidencia y esto me llamó la atención y empecé a tratar de demostrar que funcionaba. Y así es como comencé mi investigación.
No hubo mucha ayuda. El único artículo que tuve fue sobre Kegel. Mirando hacia atrás, eso no fue muy científico. Pero no entendía la ciencia de la investigación en esos días. Así que tuve que comenzar registrándome en una universidad para hacer mi maester. Pero aún seguía trabajando en el hospital. Ahí es donde comenzó. Obtuve ayuda del departamento de física médica para desarrollar algunas medidas para medir el suelo pélvico. Para medir si se estaba contrayendo o no porque son músculos muy difíciles de evaluar. Están en la parte inferior de la pelvis. Puedes sentirlo cuando pones los dedos en la vagina o el ano. Cuando el paciente contrae, puede sentirlo en los dedos. Pero nadie enseñaba eso en esos días. Así que tuve que encontrar una manera de enseñarme a mí misma, lo cual hice. Luego tuve una manera de medir los músculos del suelo pélvico. Seguí trabajando con enfermeras y médicos y obtuve ideas cuando me llevé bien. Pero todo era muy nuevo.
He oído que has desarrollado cursos. Pero había que desarrollar todos los ejercicios.
Creo que con cualquier rehabilitación necesitas hacerla interesante. Los ejercicios del suelo pélvico son muy interesantes porque las personas no estaban seguros de si lo estaban haciendo correctamente. Entonces eso fue lo primero que se estableció. Luego desarrollé algunos equipos de biofeedbackpara que el paciente pudiera ver que lo estaban haciendo correctamente. Esto fue en los primeros días una sonda de presión que tuvo que entrar dentro de la vagina. Posteriormente se desarrolló el EMG y hoy en día (he estado retirada 15 años) hay más formas de evaluar el suelo pélvico como con la ecografía. Entonces sí, los ejercicios tuvieron que seguir los ejercicios generales de entrenamiento muscular que hacen los atletas.
Eso es realmente genial, eso es realmente multidisciplinario. Eso es lo que queremos.
Hoy estamos en una conferencia multidisciplinaria que es ICS y se te ha hecho entrega del premio al logro de toda una vida hace algunos años. Eres un miembro de honor y me han contado una historia sobre una chaqueta amarilla. Ayer te vi con la chaqueta amarilla. ¿Puedes contarnos más sobre la chaqueta amarilla?
Cuando presenté en los primeros días, pensé que era muy importante parecer inteligente. No necesariamente para destacar. Bueno, no he estado en estas conferencias desde hace 15 años y no he usado la chaqueta amarilla en 15 años porque me vería bastante estúpida en mi vida cotidiana. Vivo en el Distrito de los Lagos, tengo un border collie y ella me lleva a pasear, pensé que la llevaría y la chaqueta amarilla no funcionaría en las montañas donde vivo. Así que pensé en ir al ICS para ver amigos y ver cómo han ido las cosas. Así que saqué la chaqueta amarilla del armario.
¿Había alguna otra razón para que usaras la chaqueta amarilla?
No, pero alguien ha dicho que casualmente ese amarillo también era del color de la orina y aparentemente un cirujano muy conocido en los años 80 cuando comencé a asistir a las conferencias siempre llevaba una corbata amarilla por esa razón. Solo lo supe anoche.
¿Hay algo más que te gustaría compartir con nosotros, la próxima generación?
Durante años viajé por todo el mundo y como ponente en un curso estás realmente bastante aislado. Nadie se atreve a hablarte por alguna loca razón. Entonces, en todos mis cursos, los ponentes invitados de todo el mundo fueron guiados por estudiantes. Los estudiantes se reunían y saludaban y se aseguraban de que los ponentes invitados tuvieran todo en los descansos y las cenas. Lo hice porque me sentía sola cuando iba invitada en los primeros días en todo el mundo. Esto me pareció lo más natural. Ayer, un antiguo ponente invitado me dijo que realmente le gustaba esto. Fue agradable escuchar eso. Esto es bueno para que cualquiera lo haga en realidad.
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